Tiene 57 años, vive con su madre, y su hija se fue a Australia a trabajar voluntariamente como enfermera del área psiquiátrica.

Cecilia vive hace 53 años en Huamachuco y fue una de las alumnas que entró cuando se inició la escuela 480, que actualmente es el Liceo Gorostiaga.

“Me destaqué en Media y Básica por ser muy buena alumna. Trabajo en custodia Metropolitana (corrales)“.

APORTE A LA COMUNIDAD DE RENCA

“Soy la vecina que siempre fue mamá soltera, me dediqué a criar y educar a mi hija. Tuve una aneurisma cerebral y por eso estoy con licencia. 

“Yo era la vecina que hacía colectas, organizaba bingos, en un momento hicimos una Navidad en la calle en la huamachuco I y II”. 

A fines de 2023 dio un giro en su actividad como dirigenta y aceptó la propuesta de crear un Comité Vecinal de Prevención y Convivencia Comunitaria en su barrio.

“Me postulé a referente de seguridad de la Macrozona 1. Tengo interés en que mi población crezca, por eso voy a todas las actividades que nos invitan para darnos a conocer. Es un honor representar a la población de Huamachuco y a Renca. Hemos gestionado proyectos de luminarias, poda de árboles en lugares peligrosos y en marzo nos unimos con el otro comité, adquirimos 12 cámaras de seguridad y las focalizamos desde Puerto Montt hasta Los Tulipanes donde está el consultorio”. 

MENSAJE A LAS NIÑAS Y MUJERES DE RENCA

“Las mujeres de Renca somos luchadoras, siempre estamos mirando por nuestras familias. Cuesta mucho pero nunca hay que dejar de golpear puertas ni bajar los brazos.

 Para mí es un orgullo vivir en Huamachuco y en Renca. Somos personas, somos humanas y tuvimos muy buenas referentes para seguir adelante. No darse por vencida y seguir adelante, siempre con respeto y honestidad. No hay que dejar de creer en que los sueños se cumplen”.