DECLARACIÓN PÚBLICA JUNTO A FAMILIAS DE VÍCTIMAS INCENDIO KAYSER

Las comunas tienen su historia y hay que cuidarla. Nuestra historia en Renca tiene un capítulo especialmente doloroso cuando los cuerpos calcinados de cinco personas renquinas aparecen, el 20 de octubre del 2019, en el edificio siniestrado de la fábrica Kayser.

Como municipio nos asiste el convencimiento de que debemos hacernos cargos del impacto que este hecho, ocurrido durante el Estallido Social, tuvo y tiene en nuestra comunidad. Nos referimos al dolor aún vivo de las familias de Julián Pérez, Andrés Ponce, Manuel Muga, Luis Salas y del joven Yoshua Osorio; al luto de los barrios en las que ellos vivían y a la pena generaliza que el recuerdo permanente de sus muertes causa en esta comuna.

“Verdad, justicia y reparación” son las exigencias básicas que sostenemos como gobierno local y es la voz que levantamos en forma consistente cada vez que hacemos referencia pública a estas muertes. Así, también, se lo hemos expresado a las cinco familias. Ellas, por su parte, tienen la convicción de que en ese Iugar se produjo una aberrante violación de los Derechos Humanos y tienen una demanda acordada: que en el sitio donde estaba la fábrica Kayser no se inicie ninguna construcción, hasta que no se hayan agotado, en forma absoluta, las diligencias y pericias que puedan generarse en el caso judicial.

Porque esta solicitud nos parece razonable y porque sabemos que estas familias renquinas no tendrán opciones de procesar su duelo si no se desarrolla un juicio acucioso y justo, nos ponemos a su Iado para apoyarlas y acompañarlas. Nos unimos a esta petición y esperamos que los vecinos y vecinas la comprendan y respalden, ya que no hay dudas que somos mejor en comunidad y eso incluye cuando lo que se impone es el dolor y la búsqueda de justicia.